Encontré en mis raíces colombianas la sabiduría andina con los secretos que unen las emociones, la mente y el espíritu con el cuerpo humano; siendo el cuerpo, el vehículo para equilibrar holísticamente al ser.
A través de los saberes andinos cree rituales que van desde la piel hasta la emoción, basados en las fases lunares o las “Burem” que en lengua Quimbaya significa lunación